el verde
que perdura en el roble
el azul
abrigo de mis ángeles
el gris
olvidado en la memoria
la paleta de los días
se insinúa apenas
en la piel de la nostalgia
es así que mis sueños
mis asombros
entretejen la trama
que sin percibir me sostiene
*
amanezco
de tanto en vez
amorosamente
en los brazos de la ternura
la piel no olvida
indiscutible
el camino de la caricia
*
es evidente
elemental y comprensible
que después de noches
remendando recuerdos
trasnochados espejismos
el alma pierde resistencia
Beatriz Martinelli
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